Revuelo de palabras.-

sábado, 24 de enero de 2009

Savia, corre por mis venas [dame aire y dame luz]-
Repentinamente se corta la luz y te pierdo. Como un eco vas desapareciendo poco a poco y cada vez tu tamaño se reduce más, hasta que te puedo sostener entre mis dedos, te miro y sos tan frágil que, sin quererlo, te hago polvo con sólo tocarte. Y es entonces cuando desapareces, te vas para siempre y ya no hay forma de rescatarte, nadie que te cure, nadie que te arregle. Sos polvo que se oculta entre la suciedad de este cuarto que ahora se encuentra habitado únicamente por mí.
Estoy atónita. No se me ocurre ni qué pensar. Definitivamente estoy sola y de vos no me queda nada más que tu silencio. Silencio que respira y se hace sentir y termina convirtiéndose en un ruido que va conmigo a todas partes. Un insoportable silencio que no me deja dormir y me trae tu imagen cayendo desesperadamente, pidiéndome ayuda. Recuerdo mi mano, como si dijera adiós, tan cerca de la tuya. Tu respiración agitada invade mi mente, me siento acorralada.
Noche sin luna.

No hay comentarios: